Jardines Viveros del Real. Foto de Comunitat Valenciana
por Claudio Ochoa
La muy española ciudad valenciana no solo es atractivo mundial por sus serenos y amigables escenarios turísticos. También por ser una meritoria Capital Verde Europea 2024, reconocimiento recibido de la Comisión Europea, dadas sus acciones en favor de la movilidad sostenible, sus numerosos espacios verdes y su consecuente alimentación saludable.
Luego de Madrid y Barcelona, Valencia es la tercera ciudad más poblada de España, con 800 mil habitantes. Poseedora de importantes vestigios de las culturas romana –desde su fundación– y musulmana.
LA ALBUFERA, EL OCEANOGRÁFIC, EL JARDÍN DEL TURIA, ETC.ETC.
Goza de codiciados espacios verdes, como el Parque Natural de la Albufera, distante unos 10 kilómetros de la ciudad, lago que se esparce en unas 2.100 hectáreas, colindando con 14.000 hectáreas en tierras bajas y pantanosas, dedicadas al cultivo de arroz, base de la famosa paella, la valenciana. El marjal humedal de Rafalell y Vistabella, comprende más de 100 hectáreas, siendo refugio de numerosas aves y hogar de diversos peces.
Ostenta también otro tesoro verde, el Oceanográfic, componente vital de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, que en total comprende 350.000 metros cuadrados, dedicados, como su nombre lo indica, a las ciencias, y también a la preservación de la vida animal, y como pulmón de la ciudad. Tan atractivo es, que en 2022 recibió 1.601.229 visitantes.
El Jardín del Turia es apreciado escudo medioambiental de la ciudad, un parque urbano ubicado sobre el que fuera cauce original de su río Turia. Debido a una enorme inundación sufrida por la ciudad en 1957, a causa del Turia, años después el caudal fue desviado, para proteger a Valencia. Este parque comprende hoy unas 136 hectáreas en 8.5 kilómetros de longitud.
El Parque de la Cabecera contribuye también al verdor valenciano y está en la cabecera del cauce del río Turia. Contiene un lago artificial que facilita la navegación, juegos infantiles y muchos jardines, además del Bioparc (https://bioparcvalencia.es/), un zoológico que nos permite sentirnos como si estuviéramos en la sabana africana, en la isla de Madagascar, en la selva ecuatorial y en los humedales africanos, entre otros medios, gracias a especies animales que viven allí, a sus anchas.
El Jardín Botánico, que posee herbario, germoplasma y huertos de plantas medicinales. Centro de estudio y desarrollo de la cultura botánica. Es parte de iniciativas internacionales dedicadas al estudio de las plantas propias y la biodiversidad vegetal. Los 80 mil metros cuadrados del parque de Benicalap, con jardinería tecnificada.
Los Jardines Viveros del Real, cuya extensión supera los 170.000 m2, con jardines diseñados en estilo románico, áreas que simulan paisajes naturales y una rosaleda de viveros. Comprende casi 2.800 ejemplares de 170 especies botánicas diferentes.
Otros espacios como el Jardín de Ayora (48 mil metros cuadrados), el Jardín de Monforte (12 mil metros cuadrados), el Parque de Marxalenes (8 hectáreas), el parque de Benimámet, con profusión de árboles, plantas y césped, etc, etc. Las calles valencianas están generosamente adornadas por árboles y jardines.
MOVILIDAD EN BICICLETA
Valencia está situada sobre la mayor planicie que tiene la cuenca mediterránea de España, lo cual, junto a su clima mediterráneo suave y más de 300 días soleados al año, han sido factores para el estímulo de la bicicleta como medio de transporte popular. La ciudad tiene más de 170 kilómetros en tramos de carril bici (la red de su metro es menor, con 161 kilómetros), apoyados por el Valenbisi, servicio público de alquiler de bicicletas. Dispone de 275 estaciones y casi 3 mil bicicletas, al servicio de los usuarios, además.
Los usuarios de los carriles bici valencianos se caracterizan por el orden, no invaden aceras ni zonas peatonales, respetan los semáforos y ceden el paso cuando es necesario, dan prioridad al peatón y usan los brazos adecuadamente para indicar cambio de dirección, respetan el sentido de las calles, no utilizan sus teléfonos mientras manejan. En general prima la cultura del respeto…
Abundan los establecimientos de alquiler de bicicletas y servicios de tures “para conocer la ciudad en tres horas, a bordo de bicicleta” como asegura una de sus promociones.
El Barómetro de la Bicicleta de la RCxB para el año 2022 indica que un 82,6 % de las personas entrevistadas en Valencia tienen cuando menos una bicicleta en el hogar. El promedio de bicicletas en el total de hogares es de 2.
David Gómez, guía turístico de Valencia nos habla sobre la bici en esta ciudad: https://www.facebook.com/watch/?v=950670849851469
Las patinetas son otro medio de transporte popular en esta ciudad, y recientemente son reguladas por las autoridades, para asegurar a tiempo su uso adecuado. Ahora deben estar matriculadas, certificadas, y su conductor debe estar asegurado y no puede andar a una velocidad superior a los 25 kilómetros por hora.
PUNTO APARTE PARA LA HUERTA
El turismo, especialmente de naturaleza y deportivo, va aparejado a estos espacios verdes descritos en los párrafos anteriores. Resulta muy agradable un tur por el parque natural de la Albufera, y Civitatis está entre las empresas que lo ofrecen. https://www.civitatis.com/es/parque-natural-de-la-albufera/
En el 2022 Valencia recibió 2.197.133 visitantes, de los cuales un 61 por ciento internacionales y 39 por ciento nacionales.
Especial atención merece otra área muy verde, que también aporta al turismo y a la gastronomía. Se trata de la Huerta (o l’Horta), un espacio de 120 km2 alrededor de la ciudad. Allí podemos apreciar, huertos, viñedos, olivos, arrozales, chufas (el tubérculo medicinal), naranjos, etc. La FAO ha reconocido este sistema de regadío como Sistema Importante del Patrimonio Agrícola Mundial (SIPAM).
En la Huerta y sus arrozales está buena parte del plato universal de Valencia, su paella.
En la Huerta es factible hacer un tur guiado en bicicleta y un paseo en barca por la Albufera. Ya hay un corredor ciclo peatonal de 26 kilómetros en torno a Valencia, que comunica a la Huerta con el mar Mediterráneo. “La tierra abrazando el cemento de la que es la única ciudad del mundo con un espacio agrícola periurbano”, dicen por ahí.
La Huerta nos ofrece frutos y verduras como el pimiento rojo, el cual acompañado de bacalao da el plato llamado esgarraet; de variedad de estas verduras nació la “olla valenciana”, una popular sopa; la horchata, un refresco que abunda entre los valencianos, preparada a partir de la chufa, un tubérculo comestible, también de la huerta valenciana.
LAS RUTAS VERDES
La Capitalidad Verde de Valencia ha diseñado cuatro rutas verdes, que facilitan el goce de los logros en la materia, como son naturaleza, recuperación del espacio público y movilidad sostenible, y el modelo de alimentación saludable.
EL RÍO VERDE. De oeste a este, comprende los casi 9 kilómetros del cauce urbano del río Turia, antes de ser desviado. Hoy son áreas para el picnic, ciclovías, deportes varios y contemplación de 70 variedades de aves y 40 especies arbóreas que allí habitan.
CENTRO HISTÓRICO. Partiendo de la Estación del Norte, recorrido peatonal en uno los centros históricos más grandes de Europa. Monumentos de diversas épocas y edificios patrimoniales rehabilitados. Movilidad sostenible a través de espacios públicos rehabilitados. La dicha de conocer la Catedral, en donde reposa el Santo Grial; la Lonja, que fuera poderosa “bolsa” de la seda; el Mercado Central, con frescos frutos del mar y cuanto produce la tierra valenciana…
LA HUERTA, EL MAR Y LA ALBUFERA. Desde el Parque Natural de La Albufera inicia esta ruta, pasando por los arrozales (que han hecho famosa a Valencia y su paella), La Huerta y sus verduras y frutas, y la costa Mediterránea y sus variados pescados. Hay transporte público para realizar este recorrido, o hacerlo en bicicleta. Un paisaje marcadamente verde y azul.
El verde valenciano es tan favorable para sus habitantes, que el promedio de vida de sus mujeres está en 86,5 años y el de ellos en 80,8 años.